Se presenta un documento de propuestas para mejorar el cuidado a la salud mental perinatal

Elaborado por la OMS (2022)

Muchas mujeres experimentan cambios en su salud mental durante el embarazo y durante el año posterior al parto. Según señala la Organización Mundial de la Salud (2022), la ansiedad y la depresión en el período perinatal suelen ser comunes, afectando a 1 de cada 10 mujeres pertenecientes a países de altos ingresos y a 1 de cada 5 en países de ingresos bajos y medianos.

A este respecto, la OMS advierte de que el empeoramiento de la salud mental de una mujer durante el período perinatal puede afectar tanto a su bienestar, como al del bebé y su familia en general. Además, la mala salud mental se asocia con mayores riesgos de complicaciones obstétricas (p. ej., preeclampsia, hemorragia, parto prematuro y muerte fetal) y suicidio (se estima que el 20% de las madres experimentará pensamientos suicidas o conductas autolesivas).

La prevención, la detección y el tratamiento a los problemas de salud mental durante el período perinatal son cruciales

De acuerdo con la Organización Mundial, la mala salud mental durante el período perinatal puede presentarse de muchas maneras, destacando, entre sus síntomas generales, la sensación de tristeza, la falta energía y motivación, el dejar de realizar experiencias y actividades con las que antes disfrutaban, preocupación excesiva, problemas de sueño (dormir demasiado o insomnio), problemas de alimentación (comer en exceso o falta de apetito), dificultades para concentrarse, sentirse incapaces de tomar decisiones, sentimientos de culpa y desesperanza, sensación de que algo malo va a suceder, etc.

En los últimos años, se ha incrementado la concienciación sobre la importancia de atender la salud mental durante el embarazo y después del parto. Sin embargo, tal y como se ponía de relieve en el Día Mundial de la Salud Materna, celebrado el pasado día 3 de mayo, todavía queda mucho trabajo por hacer. A este respecto, son muchas las madres y familias que no llegan a recibir la atención sanitaria adecuada para garantizar su salud mental. Asimismo, el estigma en torno a los problemas de salud mental continúa siendo un obstáculo que afecta especialmente a este grupo.

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